sábado, 14 de abril de 2007

¡No puede caber aquí!


Ya sé que la noticia es antigua y, de hecho, ya se hizo eco de ello cuando el pene pasó a ser la principal atracción del museo de la erótica de San Petersburgo. Aún así, no deja de sorprenderme: 40 centímetros de pene. Ríete de Nacho Vidal, Rocco Siffredi y de ti, estimado lector (las lectoras no nos reímos tanto).

Mucho se sabe o se dice del tal Rasputín, y su biografía la tenéis en Wikipedia, pero lo sorprendente es el tamaño de su pene. Pese a que, evidentemente, la noticia tiene años, navegando por la red he dado con el post de Blog de Notas y he vuelto a caer en la estupefacción. Así que por si alguno no sabía de qué iba el tema y seguía pensando que 15 cm (por decir algo al azar) era una buena medida, que se deje de tonterías.

Se dice que el tal Rasputín tenía una vida sexual de locura y desenfreno. Pero, ¿cómo? Si en alguna de sus vaciladas varias Nacho Vidal ya decía que había chicas que veían su pene y se echaban para atrás (otras se ponían de espaldas directamente), ¿qué haría el tal Rasputín? Tú quedas con él una noche, te tomas unas copitas y acabas yendo a su cama y…PAM! Te encuentras con eso, ahí, mirándote (porque con semejante tamaño, seguro que tenía hasta ojos) y…¿qué haces? Yo creo que saldría corriendo (y no hago ninguna broma con este verbo, venga) pero no sé, si tan apasionada era su vida sexual, deberían ir todas sus amantes cual pollo a l’ast más felices que nadie. Al menos sonreían, pero no por el placer, sino por la perplejidad del asunto.

Ahora sólo quedan 28,5 cm (¿Sólo?) pero vamos, que no me extraña la carita de vicio-sorpresa de la chica de la foto. Y mira que el pene en su potecito y con ese color no inspira nada bueno, pero muchas tenemos la facilidad de imaginar el cómo fue… En fin, yo que cantaba tan feliz aquello de Boney-M de “Ra-Ra-Rasputin, lover of the Russian queen. There was a cat that really was gone” cuando escuchaba su nombre, ahora me decanto más por cantar lo de la peli La Cosa Más Dulce: “NO, NO PUEDE CABER AQUÍ!!!”

1 comentario:

Marujita Robinson dijo...

Mare mía, y dónde se habrá ido el cacho que falta...